La Venus de Zugarramurdi

El pasado fin de semana por fin pude ver una película que hacía tiempo que quería ver, Las brujas de Zugarramurdi. Se trata de una comedia española, dirigida por Álex de la Iglesia, en la que podemos ver una parodia de un episodio de la España profunda, la persecución de mujeres por parte de la Inquisición. Este pueblo es especialmente conocido por la caza de brujas que se produjo durante el siglo XVII y en la cual se juzgaron y ajusticiaron miles de personas, entre ellas niños y niñas, debido a una oleada de pánico que invadió el pueblo y los alrededores.

En este caso, en la película, se narra cómo en la actualidad siguen existiendo brujas en Zugarramurdi, un encantador pueblo del Pirineo Navarro, cómo siguen realizando sus aquelarres y el lugar donde según la historia popular se reunían las hechiceras, una enorme cueva. Además se narran diversos hechos históricos, como por ejemplo la emigración hacia Cuba y la posterior vuelta con abundantes fortunas. Aún tratándose de un tema tan serio creo que el director ha sabido respetar y hacer buen humor a la par que inteligente en su producción.

Algo que me sorprendió es la aparición de la Venus de Willendorf. En esta Venus se representa un desnudo femenino, en el que subrayan aquellas partes de la anatomía humana femenina, dado que en la época en la fue realizada se le daba una gran importancia. Se destacan los pechos, la cadera y el pubis, ya que la figura está relacionada con el tema de la fecundidad.

En la película, la Venus de Willendorf aparece como la Diosa Madre a la que adoran la brujas de Zugarramurdi y, por qué llevan a cabo sus hechizos y aquelarres para conseguir devolver a dicha Diosa su poder e influencia y a la mujer el protagonismo de la antigüedad perdido con el tiempo.  Como podemos comprender, está estrechamente relacionado el hecho de tratarse de una figura que representa la reproducción y la fecundidad y el en celuloide como Diosa madre. 

Dibujo de la Venus de Willrndorf en la película

No se pretende hacer ningún tipo de publicidad acerca de la película, solamente comentar sobre la Venus de Willendorf 

El desnudo y el Autorretrato. Richard Gerstl

Buscando información sobre Richard Gerstl me topé con un cuadro suyo, expresionista, con una pincelada suelta y casi agresiva, donde podemos observar dos géneros de los que hemos hablado en clase del tema 6: el retrato (autorretrato) y el desnudo.
Observamos en la composición cómo el propio autor se ha autorretratado desnudo, con una paleta en la mano, por lo que podemos nombrar también la imagen del artista, apartado también del tema. Richard Gerstl se ha querido inmortalizar, quizás como a él le gustaba trabajar, quizás como a él le gustaría haber trabajado. Como ya se dijo, muchos pintores se retrataban realizando su oficio, por un lado para reivindicarse, por otro para darse a conocer.
Respecto a la paleta cromática podemos destacar del cuadro la reducida gama de colores utilizada, con una gran variedad de tonos azules, que aportan al cuadro sensación de frío y que choca con la desnudez.
En mi opinión, éste es un artista al que le gustaba retratarse de forma diferente, llegando incluso a aparentar algún tipo de enfermedad mental, como se puede realizar jugando con los colores, los gestos del rostro como la sonrisa, los focos de luz o la manera de representarse.

Santa Claus viaja por el arte.

El nacimiento de Venus de Sandro Botticelli, 1486 

Acercándonos al período navideño, traigo al blog unas cuantas obras de arte donde el artista estadounidense Billy Wheeler se disfraza de Santa Claus y se introduce en ellas, sustituyendo algún personaje de la obra.

No se trata solo de una acción más o menos graciosa y ya, consta de un proceso donde la figura de Santa se intenta fundir (dentro de sus posibilidades) en la escena de la obra utilizando trajes rojos de diferentes tonos y diferentes tipos de luces. Toda la obra se exhibirá en el Museo de Arte de Filadelfia durante el mes de diciembre.

La cena en Emáus de Caravaggio, 1601

Clase de Ballet de Edgar Degas, 1880

Pygmalion y Galatea de Jean-Leon Gerome, ca. 1890

Baile en Molin Rouge de Henri de Toulouse-Lautrec, 1890

La creación de Adán de Michelangelo, 1511–1512

El puente japonés de Claude Monet, 1899

El sueño de Henri Rousseau, 1910

Atardecer en Extremadura

SIBARITA

¡A mí n'amás me gusta que dali gustu al cuerpo! Si yo juera bien rico jacía n'amás eso: jechalme güenas siestas embajo de los fresnos, jartalmi de gazpachos con güevos y poleos, cascalmi güenos fritis con bolas y pimientos, mercal un buen caballo, tenel un jornalero que tó me lo jiciera, pa estalmi yo bien quieto, andal, bien jateao, jechal cá instanti medio, jumal de nueví perras y andalmi de paseo lo mesmo que los curas, lo mesmo que los méicos... Si yo juera bien rico jacía n'amás eso. ¡Que a mí n'amás me gusta que dali gustu al cuerpo!

Gabriel y Galán, en Ehtremeñu

Esta foto la hice el agosto de 2008. Estaba de vacaciones en el pueblo de mi padre, Aceituna (Cáceres). En el momento que hice la foto volvía a casa, es más, está hecha desde mi propia calle (la del pueblo, caro). Fue una prima, que me acompañaba en ese momento, la que me dijo que hiciese la foto al cielo, que estaba precioso a esa hora del día, el atardecer. Al enfocar con la cámara me di di cuenta de que la farola que aparece en el lado superior derecho dotaba de una gran particularidad a la imagen.

El paisaje que vemos es el de una vista hacia Portugal, cuya frontera no se encuentra muy lejos de allí, cosa que se observa en la influencia del hablar de las personas del lugar. El poema de Gabriel y Galán que se muestra fue escrito mientras vivía en Gijo de Granadilla, y está en castúo. Guijo de Granadilla dista unos 15 o 20 minutos desde Granadilla.

Hablando de la foto, lo que principalmente observamos en un paisaje, aunque lo me más gustaría destacar la farola, me parece un elemento que dota, como ya he comentado, de una gran identidad. Es un elemento compositivo peculiar, que podemos entender como un elemento que representa la unión de lo natural con el pueblo, lo artificial.

Señalar por otro lado el foto de luz, ese sol poniente, que ilumina con una intentísima luz de oeste. Es un gran foco que parece seguir iluminando la imagen y la estancia con luz natural, como si los rayos se hubiesen quedado inmortalizados al apretar el botón de la cámara. Este sol es el que provoca la iluminación de las nubes, y regala ese color tan peculiar: un color naranja preciosísimo.

Me siento muy afortunado por haber obtenido esta fotografía. es una imagen que despierta variedad de sentimientos en el espectador, al menos en mi. Espero que a ti te ocurra lo mismo...